Imagínate un sábado por la tarde en la paradisíaca isla de Mallorca. Estás en la playa, a 35 grados de temperatura. Intentas sofocar el calor metiéndote en las cálidas aguas del Mediterráneo. Sales y en 5 minutos el agua que corre por tu nuca se convierte en sudor. Nada, ni sobra, ni baño, ni siesta calma el calor. Solo hay una cosa que por unos instantes te haga olvidar los grados del termómetro, un ingrediente esencial en los días de verano, un elemento que a todos nos encanta: el helado.
Mallorca cuenta con una gran tradición en la fabricación de helados. Artesanos heladeros de la isla llevan siglos construyendo la indiscutible fama con las que hoy cuentan muchas de las heladerías de la isla. Con ingredientes naturales, típicos de la tierra de Mallorca y con las técnicas actuales, los helados mallorquines son una exquisitez que debes probar si visitas la isla.
En este post os recomendamos 10 heladerías top en Mallorca donde podrás degustar los mejores helados de toda la isla. Toma nota y si veraneas en Mallorca no dejes de probar alguno.
1.Can Miquel, en Palma. Comenzamos por un clásico de clásicos, la heladería Can Miquel. Situada en el centro de Palma, actualmente en la calle Montcades 9, lleva más de 35 años vendiendo sus tradicionales y artesanos helados. Desde su comienzo en 1979, la familia Solivellas ha cuidado mucho la elaboración de sus helados y la elección de sus ingredientes. La heladería cuenta con una carta de meriendas y más de 90 sabores de helado. Nuestros preferidos el de avellana, almendra mallorquina o café. Y un secreto y una de nuestras debilidades: Can Miquel, además de ofrecer uno de los mejores helados de la ciudad se pueden degustar unas trufas de cacao únicas.
2.Gelats Paco en Palma. Helados mallorquines con influencia alicantina. Esta heladería mítica en Palma, está situada en dos puntos de la ciudad: en calle Blanquerna, 10 y el de toda la vida, calle Benet Pons i Fàbregues 1 y lleva más 80 años ofreciendo al público helados artesanos y de una calidad excelente. La heladería ofrece más de 45 sabores diferentes y el más famoso es el conocido como “bombón”, parecido al helado de estraciatela. Además, la heladería cuenta con multitud de helados que contienen un alto porcentaje de fruta natural y con helados aptos para los diabéticos e intolerantes a la lactosa. Si quieres conocer a fondo la historia de este negocio pincha aquí.
3.Can Joan de S’aigo, en Palma. Seguimos por las callejuelas del centro de Palma y nos topamos con la cafetería por excelencia, Can Joan de S’aigo. Un lugar que mantiene la decoración neoclásica de cuando el local abrió en el siglo XVIII. Situado en calle Can Sanç, 10, la cafetería ofrece helados artesanos, de los de antes. Nuestros favoritos son los de fresa (con un sabor a fresa auténtico) y almendra y una recomendación, acompáñalos con un cuartó mallorquín, un bizcocho suave y delicado, muy esponjoso. ¡Querrás repetir!
4.Heladería Can Nero, en Andratx. Alejándonos de la capital nos vamos al encantador pueblo de Andratx. Situada en la calle Archiduque, 27 nos encontramos con una pequeña heladería pero con una larga trayectoria y experiencia en la elaboración de helados artesanos mallorquines, más de 40años. Actualmente regentado por el bisnieto del fundador Guiem Alemany, Luis ofrece a sus clientes una variedad limitada pero exquisita y muy bien elaborada de 15 sabores de helados en verano y otras tantas y diferentes en invierno, según la cosecha de cada estación. Hechos en la misma tienda y con productos autóctonos, uno puede degustar helados de sandía, café, mango y nuestro preferido el de “figa de moro” o higo chumbo.
5.Sa Fábrica de Gelats, en Soller. Esta heladería joven no tiene nada que envidiar a las anteriores nombradas. Creada en 1994, Sa Fábrica de Gelats ha trabajado muy duro para ponerse a la altura de los artesanos tradicionales heladeros mallorquines. Situada en el centro del pueblo de Soller, la heladería ofrece helados artesanos, elaborados con la mejor materia prima de la isla y afirman hacerlos “como los de antes”. Un sabor muy especial que hay que probar es el de naranja, elaborado como no puede ser de otra manera, con las famosas naranjas de Soller.
6.Pink Flamingo en Ses Salines. Se decides darte un baño en las paradisíacas playas de la isla, situadas en el sur, no te olvides de hacer una para en el pueblo Ses Salinas, un lugar de tradición salinera en el que un italiano se ha asentado y ha abierto una heladería muy especial. En Pink Flamingo, puedes degustar los helados al más puro estilo italiano, eso sí artesano y elaborados por su propio dueño. En la heladería hay sabores tan originales como sabor “Whatsapp” o “Facebook”. Pero también puedes probar el mítico sabor stracciatela o mascarpone. La heladería abre los domingos por la tarde así que después de la playa date un capicho.
7.Helados JOP en Campos. Siguiendo la ruta por el sur hacemos una parada en Campos lugar conocido por sus riquísimas panaderías. Con una historia de más de 60 años, esta fábrica de helados no tiene un punto de venta específico si no que ofrecen sus productos en los comercios locales de la zona. Con más de 20 sabores, los más vendidos y que nunca fallan son los clásicos: avellana, almendra, coco y vainilla.
8.Es Colonial en la colonia de Sant Jordi. Esta heladería-pastelería situada en la calle Gabriel Roca 9, ofrece a quien quiere degustar un helado que entre mezcla tradición en sabor y modernización en elaboración. Además de ofrecer helados, tiene gofres caseros y batidos hechos con sus propios helados. En el mismo local donde se encuentra la heladería está la fábrica por lo que se puede decir que “están recién salidos del horno”.
9.Helados Garrigo en Alcudia. Nos alejamos cada vez más del centro de la isla y vamos a parar a la preciosa bahía de Alcudia, en el norte de la isla, un enclave perfecto para degustar un cremoso helado, ¿dónde? en Helados Garrigo, situado en calle del Moll, 27. Empresa familiar con más de 40 años de experiencia en la elaboración artesanal de helados, aún siguen utilizando la receta de antaño. Con más de 50 sabores en verano, los tipos que más triunfan son los de avellana, vainilla y chocolate. En verano amplían la variedad de helados con sabor a frutas, totalmente naturales y artesanales y elaborados con ingredientes locales. También hay que destacar su deliciosa horchata y granizados.
10.Gelats Valls en Pollensa. Muy cerquita del Puerto de Alcudia seguimos nuestro recorrido y paramos en Pollença para degustar un helado casi centenario, Gelats Valls, “la primera factoría de elaboración de helado artesanal en la localidad de Pollença”. Desde 1929 la familia Valls no solo ha respetado la manera más purista de hacer un helado, sino que además son unos fervientes defensores del producto local. Por eso tienen elaboraciones limitadas con productos locales y de temporada, como el de albaricoque, higo, limón y naranja. Estos sabores van cambiando según la estación. Además de los helados tradicionales, Gelats Valls cuenta con una amplia gama de sabores y helados de palo o copas gourmet, se nos hace la boca agua solo de pensarlo…
