Una de las zonas más increíbles que nosotros hemos visitado de los EE.UU es, sin duda alguna, la de los parques nacionales de la costa oeste. Algunos han sido escenarios de grandes películas, como las del Far West, pero otros siguen siendo todo un descubrimiento para muchos de nosotros.
En este artículo queremos hacer un pequeño recorrido por algunos de estos parques que nos han robado el corazón.
Antelope Canyon
El Antelope Canyon tiene la peculiaridad de que se encuentra a 36 metros bajo del nivel del suelo. Este parque se ha formado por los torrentes de agua que durante los monzones de finales de verano han ido erosionando esta roca de arenisca hasta dar lugar a uno de los paisajes más fotogénicos del mundo. Para visitarlo es recomendable hacerlo con expertos, ya que a la vez que bello puede ser un lugar algo peligroso.
Death Valley
Considerado uno de los lugares más calurosos y secos de los EE.UU, es uno de los lugares más especiales, ya que se encuentra por debajo del nivel del mar. Casi un millón de personas visitan al año el Death Valley, un parque nacional con una diversidad de curiosos y áridos paisajes. Cuando se visita el Death Valley hay que llevar grandes cantidades de agua, ya que se pueden alcanzar temperaturas de hasta 50ºC. El calor que se sufre es tal que se pierde mucha agua con el sudor y sin darte cuenta puedes deshidratarte.
Bryce Canyon
Bryce Canyon, al contrario de lo que pueda hacernos pensar su nombre, no es conocido por su cañón sino por las chimeneas de hadas, como suelen ser conocidas. Estas formaciones rocosas son el resultado de una erosión del agua que a través de las bajas temperaturas que produce que se congelen y a las lluvias, han dado lugar a estas curiosas formaciones. Su altura puede superar los 30 metros y es un parque nacional absolutamente asombroso.
Grand Canyon
Es el parque nacional más conocido de los EE.UU y me atrevería a decir que es el parque nacional por excelencia. Este gran cañón de 2km de profundidad es fruto de la erosión del terreno causado por el río Colorado. La inmensidad del cañón lo hace sobrecogedor y este paisaje solamente te genera una duda, ¿cómo conocerlo? Hay varias formas de explorarlo: por aire, por tierra a través de la cadena de miradores que rodean ambos lados del río o simplemente recorriendo sus rápidos… cualquier manera será perfecta para disfrutar de este gran lugar.
Monument Valley
Este parque nacional es uno de mis favoritos y es propiedad de los indios navajos. Esto quiere decir que solamente ellos pueden explotarlo y mostrarlo a los turistas. Si no te suena nada el nombre de este gran parque nacional, seguro que si has visto Forrest Gump, Transformers, Regreso al futuro o alguna película de John Wayne lo reconocerás enseguida. Sus grandes formaciones, llamadas mesas, esculpidas en medio de la inmensidad, no dejarán de abrumarte. Además, el poder tener la oportunidad de conocer el parque, sus relieves, así como la cultura navajo, hacen sin duda una experiencia única.
Yosemite
Yosemite es conocido por el Half Dome, un domo granítico que es la imagen característica de este parque nacional. Sus saltos de agua, como el Velo de la Novia, su fauna de osos y ciervos y las secuoyas lo convierten en un paraje único. Aquí se pueden hacer algunos trekkings espectaculares y para los más atrevidos del mundo de la escalada, aquí se encuentra el Gran Capitán, una imponente vertical no apta para todo el mundo.